Lo que se debe y no se suele decir

domingo, 15 de julio de 2007

Se acabó lo que se daba...

No me creo aún que ya hayan pasado las tres semanas. Parece que fue ayer cuando aterrizaba en Newark y cuando me daba mi primer paseo por la “Big Apple”… cuando uno tiene cosas que hacer, el tiempo pasa “volando”.

Tres semanas inolvidables de ver edificios, parques, acostumbrarse a la vida americana, conocer gente de todo el mundo, hablar y mejorar un poquito el inglés, comprar ropa y recuerdos, acordarse de los que se han quedado en España… tres semanas intensas en las que ha habido tiempo para todo menos para aburrirse.

Realmente merece la pena venir a NYC, a Manhattan concretamente. Por suerte mi residencia estaba bien situada, en pleno corazón junto a edificios tan emblemáticos como “Grand Central Station”, ONU, el Centro o el que para mi es el edifico más bonito de la cuidad: el Chrysler. En apenas 5 minutos se llegaba a la academia, en no más de eso a la estación de metro y de ahí a cualquier rincón de la ciudad.

Cosas para no perderse:
- “Central Park”: metros y metros de parque, de montañas, de praderas, lagos… miles y miles de ardillas y pájaros. Alquilarse una barca o una bici está muy chulo; ir de picnic también. Intentar caminárselo entero es una locura.
- “Chinatown”: para comprar todo tipo de regalos, relojes, bolsos… y practicar el “regateo” con los chinos.
- “Empire State Building”: fundamental subir a la planta 86 para ver toda la ciudad.
- “Seaport”: el puerto en sus dos vertientes.
- “Century 21” y demás tiendas de ropa. Además de ver la “Zona Cero” encuentras la ropa de marca (original) más barata del mundo. Fundamental traerse la maleta vacía y llenarla aquí.
- Partido de Baseball en el estadio de los “Yankees”. Sin duda lo mejor del viaje, vaya risas nos echamos viéndolos jugar, comiendo y bebiendo cerveza, bailando y cantando; todo como en las películas.
- “Coney Beach”: una playa como Dios manda. En realidad sólo he ido a dos, pero la otra además de estar muy lejos (tren y bus) era malísima. A esta se llegaba en metro, miles de tiendas, sitios para comer, el agua limpia, un chaval ofreciendo cerveza el la playa al increíble precio de 3$ y miles y miles de personas decentes y bien vestidas.
- Un paseo por “SOHO”: zona pija llena también de tiendas de ropa y zapatos.
- Otro paseo por “Times Square” de noche: todo luz y color en miles de pancartas gigantes. Gente y más gente, puestos en la calle y tiendas de souvenirs, restaurantes y bares.
- “Appel Store” de la 5th Ave. Muy bonita tanto por fuera como por dentro, mucho mejor que la de SOHO.

Eso sí, aquí o tienes más de 21 años o no entras a los bares ni a comprar pipas (es o no Jaime?? Hombre, siempre quedará encontrarse con un portero cazurro o que te dejen el DNI). No he acabado de entender que con 16 se conduzca o se pueda tener un arma pero para beber o simplemente entrar se necesiten los 21. Un colega de 17 se hizo una “ID falsa” escaneando su pasaporte y ha venido con nosotros a todas partes… es otra opción.

La comida ya sabéis que es cara y mala. Aquí no esperes comer otra cosa que pollo, hamburguesas, pavo, patatas, pizza, huevos.

Para ir de fiesta… mejor hacerlo antes de salir de España y a la vuelta porque sino hay que coger 200$ y meterlos en la cartera o estar toda la noche a base de cerveza (al precio de 8$ cada una). Eso sí, aquí nada de garrafón; las copas a 14$ (en vaso pequeño y aguadas) y los chupitos a 8$.

Los taxis amarillos baratitos si te montas 4 ó 5 a menos que te metas en un atasco. Yo sólo los cogía de noche que no había mucho tráfico. Hay miles y miles por toda la ciudad y el minuto sale a 0,40$.

De las “tips” o propinas ya hablé en otro post. Sólo añadir que llegó el momento de no dejar ni un dólar más, y así lo hice a menos que el servicio hubiera sido excelente (que no se dio el caso).

Me voy un poco triste pero me consuela saber que mañana veré a mi gente, dormiré en mi camita, comeré paella, jugaré al fútbol, veré a Sharky y pasaré calor como todo buen hijo de vecino. El pijerío se queda aquí; los recuerdos, lo aprendido y las nuevas amistades me las llevo conmigo.

Cierro este nuevo capítulo en mi vida. Me voy a embarcar que estoy sin un $ y más me vale no perder el vuelo. Eso sí, por mi me quedaba aquí más tiempo, a vivir o incluso trabajar, después de este tiempo, I LOVE NYC!