Lo que se debe y no se suele decir

domingo, 2 de julio de 2006

Verano Azul... sobre la amistad

No entiendo por qué no se puede ser amigo de cualquier persona, cual es la razón de que ello no sea normal... A mi me da igual, la madurez no radica en la edad y por ello, una vez alcanzado el mínimo exigido, de todos se puede aprender, disfrutar, conversar, ayudar y ser ayudado.

El hermetismo al que algunos se aferran y el mantenimiento de grupos cerrados no llevan a ninguna parte. En esta vida todos tienen algo que aportar y de todos se puede aprender para día a día ir mejorando. El día de mañana puede que no se nos pidan cuentas de lo que hemos hecho sino de lo que hemos dejado de hacer.

Hay padres y madres que se empeñan en seguir decidiendo que es lo mejor para sus hijos aún cuando estos ya pueden tomar esas decisiones por sí mismos. El sobreproteccionismo, el no querer ver que los hijos se hacen mayores es un error que hay que atajar de raíz. No hago un llamamiento a la desobediencia ni a la rebeldía, sólo al razonamiento.

Me siento afortunado y agradecido de conocer a tanta gente, de entre ellos poder presumir de buenos amigos tras muchos años de conocernos aunque sean "4 años más pequeños". Los prefiero sinceramente antes que tener que juntarme con los que aún siendo "4 años más grandes" su madurez, ideología y escasos gustos en común dejan mucho que desear.

Y para los que vivieron en otra época mejor, donde se veía y vivía como en "Verano Azul" ya saben a qué me refiero. Y a los que pretender acabar con esta amistad les diré que ya son muchos los que lo intentaron y quedaron en el intento. A mis amigos los elijo yo, y por ellos… hasta la vida.